PELIGRA EL IPN EN MANOS DE YOLOXÓCHITL BUSTAMANTE DÍEZ

En los casi 54 meses que lleva al frente de la administración del Instituto Politécnico Nacional, Yoloxóchitl Bustamante Díez, directora general de esta Institución, en sus 77 años de vida, ha vivido hechos inéditos que atentan contra el futuro de las nuevas generaciones de egresados con su nuevo modelo educativo que ya fracasó en el nivel superior y con otra imposición más del nuevo Plan curricular que entrará en vigor a partir de agosto próximo, para la enseñanza media superior, pues se reducen en un 20% promedio de horas comparado con el plan vigente hasta junio del presente año. Con la “justificación” de que hay un índice de reprobación muy “alto” y para reducir este último hay que reducir horas a los programas de estudio de Matemáticas, Física y Química.

Lo que resulta contradictorio con lo que tanto presume la administración del IPN que en la prueba enlace los alumnos del Instituto son los que mejores resultados ha obtenido. Si es así, entonces por qué se le reducen horas a los contenidos de las ciencias básicas, que son la columna vertebral de las ciencias exactas y de las ingenierías que se imparte en el Instituto. Además en este mismo sentido, resulta también contradictorio con la política educativa en educación básica en la que se pretende a nivel nacional una mayor permanencia de los alumnos en las escuelas, hoy llamadas escuelas de tiempo completo.

Con el nuevo modelo de la educación superior, donde la administración de Bustamante Díez ha logrado imponerlo, ha reconocido que el índice de reprobación se incrementó hasta un 40 porciento, quien al mismo tiempo pretende se justificarse diciendo ahora, que la deserción disminuyó porque continúan en el Instituto. Esto, una vez más, prueba que la administración de Bustamante Díez es una administración autista en materia académica.

Por otro lado, están las violaciones a los derechos humanos más elementales en contra de todo integrante de la comunidad trabajadora del IPN que se le ocurra disentir de la administración de Bustamante o en contra de las autoridades de las escuelas centros o unidades de enseñanza, es decir, es este sentido, la administración ha sido intolerante y represiva en diversas forma contra todo aquel que disiente abiertamente, llegando al extremo, permanentemente de levantarles actas administrativas para que se cambien de adscripción o en caso contrario, son turnadas al Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje a quien le solicitan la terminación de los efectos del nombramiento de su plaza en propiedad del presunto violador de la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado.

Para la administración de Bustamante Díez, es un delito cualquier denuncia que se haga sobre la corrupción, nepotismo, autoritarismo e impunidad imperante, que durante los casi 54 meses que lleva de su administración, y para sostener esto último, es por ello que, hace designaciones de “Encargados e Interinos” con plazas de titulares, directores de coordinación y de escuelas, jefes de división, subdirectores, jefes de estudios de posgrado e investigación, jefes de departamento, entre otros, violando la Ley orgánica del IPN, puesto que son figuras jurídicas inexistentes, lo que se puede verificar visitando la página web del Politécnico en su directorio de funcionarios.

Además, hay una cantidad impresionante de denuncias por los recursos indebidos que se han hecho en contra del erario, pero que no ha prosperado ante la Secretaría de la Función Pública y en los medios de comunicación, falta de rendición de cuentas de los ingresos que ha recibido el Fideicomiso del Instituto, los recursos autogenerados en las escuelas, centros y unidades, asignación de plazas académicas y administrativas a discrecionalidad para cumplir compromisos “políticos”, familiares, compadrazgos y de “parejas conyugales”.

Por: Alfonso Rentería Cárdenas 

        Coord. Prensa e Imagen